Tanaka Murambi (Promoción 2024, Zimbabue), becaria de Mastercard Foundation y Catherine Korkor Akplah (Promoción 2024, Ghana), tienen en común una gran pasión por la investigación y la innovación agrícola. Por eso, decidieron trabajar juntas en su Proyecto de Graduación (PG), enfocándose en encontrar una solución real a un desafío recurrente en sus países: el tratamiento de aguas residuales. La yuca, un cultivo básico y de gran consumo en muchos países de África Occidental, genera a menudo grandes cantidades de aguas residuales durante su procesamiento, las cuales generalmente se descartan de manera inadecuada. Estas aguas, con su alto contenido de almidón, conducen a problemas ambientales y salubres.
El PG de esta dupla explora una solución sostenible a través del tratamiento biológico usando microalgas que se alimentan de manera natural de los contaminantes presentes en el agua, utilizándolos como nutrientes para su crecimiento. Con este método se reducen los contaminantes en el agua, permitiendo que sea desechada de forma segura sin dañar el medio ambiente. Además, las microalgas cosechadas pueden ser reutilizadas para otros fines, como biofertilizantes o alimentos para animales como tilapias.
Durante un experimento a pequeña escala, Catherine y Tanaka probaron dos métodos diferentes: uno utilizando solo microalgas y otro que combinaba microalgas con lodo activado como pretratamiento. Los resultados mostraron que la combinación de lodo activado y microalgas produjo mejores resultados en la reducción de parámetros clave de la calidad del agua, como la demanda química y biológica de oxígeno. Sin embargo, el crecimiento de biomasa de microalgas fue más exitoso en las aguas residuales sin pretratamiento.
A pesar de los desafíos enfrentados durante el proyecto, incluyendo dificultades técnicas y la necesidad de adaptación constante, ambas estudiantes se sienten satisfechas con los resultados y confían que podrán poner su proyecto en práctica al regresar a sus países. El arduo trabajo realizado durante meses contribuye con conocimientos en el campo de protección del agua y aborda un problema ambiental significativo en las comunidades rurales de África y el resto del mundo.
“Esta experiencia me ha dado una idea clara de cómo se realiza un proyecto de investigación real. Me siento preparada para asumir cualquier proyecto, porque ahora tengo experiencia práctica, y además, he mejorado mis habilidades de investigación y comunicación. Creo que lo más importante es que el PG me dio una perspectiva sobre la relevancia de los objetivos de sostenibilidad, y ahora es un tema que me interesa explorar en mis estudios de posgrado”, menciona Tanaka.
De cara al futuro, Catherine planea profundizar en su pasión por la gestión del agua, enfocándose en soluciones sostenibles para comunidades con escasez de recursos hídricos y Tanaka quiere continuar con una maestría que le permita seguir investigando sobre este tema para llegar a otros resultados innovadores que pueda aplicar en su país.
Con resultados prometedores y una base sólida para trabajos futuros, Catherine y Tanaka están listas para dejar una huella duradera en el campo de la sostenibilidad ambiental.
¡Gracias por su esfuerzo y su compromiso!